Otros artistas consagrados que tienen terrenos asignados son Enrique Zamudio, Mario Toral, Jaime León, Paz Lira y se le suman a la participación importantes artistas como Benito Rojo, Hugo Marín, Gonzalo Cienfuegos, Iván Daiber, Omar Gatica, Mariana Matthews, Carlos Montes de Oca, Alicia Villarreal, Nury González, Sarjo, entre muchos otros.
Para el escultor Gregorio Berchenko, que lleva tres años viviendo en el “El Valle de los Artistas” ha sido un verdadero placer, “una de las ventajas que he tenido acá es que he contado con una tranquilidad impagable. Acá hay acceso a todas las comodidades, pero depende de uno si las quiere, yo he sido feliz sin tele, sólo la música me acompaña” y agrega “Este proyecto lo encontré muy novedoso. Crear una comunidad de artistas donde se puedan expresar libremente y cada uno vivir en su mundo, es simplemente espectacular”.
Este artista plástico edificó su casa de 128 metros cuadrados con un particular diseño de interiores, la escenografía que preparó para la ópera Ernaní presentada en el Teatro Municipal de Santiago hace algunos años.
“Esta iniciativa, es un aporte que permitirá recuperar un modo de vida más amable, donde se puede poner en práctica el diálogo y las ideas en torno a la creación artística; y que cada creador pueda tener un pedazo de tierra, ayuda a enfrentarse en la soledad con uno mismo para realizar alguna obra” comentó Berchenko.
En el lugar, uno de los grandes atractivos que poco a poco se ha ido estructurando es “El Parque de las Esculturas” de Roberto Polhammer. Un parque de amistad que hace dos años comenzó a esculpirse, cuando una docena de creadores convocados por el Primer Simposio Nacional de Escultores, se instalaron en la localidad de Ranguil durante una semana y le dieron vida a lo que hoy es el lugar, marcando con ello un hito dentro del proyecto, donde se ratifica el compromiso que tiene la Fundación Cultural Plaza Mulato Gil con los artistas visuales de este país.
NUEVOS VIENTOS CORREN EN EL VALLE
Pero el proyecto no termina aquí. Las doce obras creadas y las tres hectáreas de parque pretenden seguir creciendo.
“El sitio que estamos construyendo, es el lugar que podremos ocupar para crear en total libertad, si tenemos algo que expresar, en el sentido que nos podemos desconectar del mundo y conectarnos con nosotros mismos” sostuvo el visual Berchenko.
Y con la inauguración de la segunda etapa, nuevos vientos corren en el Valle, ya que junto con ampliarse el lugar, se concreta cada vez más este sueño que en un principio parecía utópico.
Actualmente el conjunto urbanístico cuenta con 20 casas y en planes de construcción diez casas más, “creo que fácilmente vamos a llegar a las 50 casas, así también se concretarán muchos proyectos que hay en mente”, auguró Puelma.
Pero no sólo de casas se compone el Valle, pues en el lugar funcionan talleres como escuelas de plásticas, donde hay un sector para talleres de cerámica, grabado, pintura, talleres de fundiciones y arte gravado en metal, entre otras manualidades. También, dentro de los nuevos proyectos, en un futuro no muy lejano se contempla un tranque de aguas medicinales, una casa club, canchas de tenis y hasta un cuerpo de bomberos propio.
El proyecto, además de contar con un entorno natural privilegiado, está totalmente abierto a la comunidad, ya que “los que quieran visitar el lugar, como es privado, lo único que tienen que hacer es avisar al cuidador y pasar”, aseguró el escultor y propietario Gregario Berchenko invitando con esto a todos los que se sientan motivados a expresar a través del arte.
Gisella Abarca
Fotos: Marco Lara